Este segundo informe mundial ofrece nuevas perspectivas sobre el modo en que la diversidad de género en los puestos de dirección de las empresas puede mejorar el rendimiento organizativo de estas. Estas perspectivas abarcan las numerosas dimensiones de las políticas de una organización y cómo éstas pueden incidir en que haya más mujeres ocupando puestos de toma de decisiones.